Soluciones higiénicas y antimicrobianas
para nuestras barras de seguridad, asientos de ducha y accesorios

Ponte Giulio lleva décadas centrándose en soluciones seguras y cómodas para los cuartos de baño. Hace muchos años que fuimos pioneros en el uso de la tecnología antimicrobiana BioCote para reducir los niveles de bacterias, moho y algunos virus hasta en un 99,9% en la superficie de nuestras barras de apoyo, asientos de ducha y accesorios. Hoy, más que nunca, las superficies higiénicas y libres de microbios son importantes para proteger la salud de los usuarios y los productos.

Higiénico
Productos más limpios. La tecnología de iones de plata es eficaz contra una amplia gama de microbios, moho y algunos virus.

Protege a las personas. Menos infecciones
Una defensa eficaz que protege a los usuarios y cuidadores de la contaminación cruzada y las infecciones.

Entornos más limpios
Nuestros productos antimicrobianos ayudan a crear entornos más limpios para los usuarios, además de las rutinas de limpieza habituales.

Productos duraderos
Las barras de seguridad, los asientos de ducha y los accesorios funcionarán, durarán y vivirán más tiempo gracias a la acción ininterrumpida de la tecnología antimicrobiana. Productos sanos y usuarios sanos.

Nunca se detiene
Las propiedades antimicrobianas están siempre activas, trabajando las 24 horas del día y entre las rutinas de limpieza.

Barras de seguridad antimicrobianas VS barras de acero inoxidable

Las barras de seguridad antimicrobianas protegidas con BioCote incorporan la tecnología de iones de plata, siempre activa y eficaz, las 24 horas del día, los 7 días de la semana, que proporciona una reducción de bacterias y microbios de hasta el 99,9%, complementando las rutinas de limpieza. La tecnología permanece durante toda la vida útil de los productos y no se desgasta ni se elimina con el lavado, proporcionando una barrera segura y probada contra bacterias y mohos.

El acero inoxidable proporciona una superficie compacta y libre de poros, relativamente fácil de limpiar. Unas rutinas de limpieza adecuadas, profundas y constantes pueden ayudar a reducir las bacterias, pero no siempre es así, sobre todo en entornos muy transitados. Por lo tanto, es imposible confiar en la limpieza cuando se trata de superficies libres de bacterias, especialmente en productos de uso tan extendido que muchas personas tocan repetida y constantemente y el riesgo de contaminación cruzada es muy alto.
Más información sobre la tecnología antimicrobiana BioCote